Mostrando entradas con la etiqueta Alteraciones de la voz.. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Alteraciones de la voz.. Mostrar todas las entradas

domingo, 10 de enero de 2016

FRÍO Y VOZ: CUIDADOS INVERNALES.



Después de pasar un otoño tan cálido llega el invierno haciendo que bajen las temperaturas y se instalen los vientos provocando el tiempo ideal para los resfriados.
Aquellas personas que trabajan con su voz tienen que cuidarla especialmente en esta época. Te damos 7 consejos para que descubras cómo cuidar la voz durante el frío y mantenerla en perfecto estado.
Todos debemos prestar atención a nuestra voz debido a que es el instrumento fundamental en nuestra comunicación con el mundo.
Para los cantantes, locutores, animadores, profesores, operadores telefónicos y en general todas aquellas personas que usan su voz para ganarse la vida es importante cuidar las cuerdas vocales, en especial durante el invierno.
  1. Proteger la garganta del frío con una bufanda, pañuelo o fular. Es importante protegernos de los cambios bruscos de temperatura.
  2. No olvides abrigarte muy bien durante el invierno y mantener tu cuerpo caliente, de esta forma conseguirá evitar los resfriados que ponen en riesgo tu salud y tu voz durante el invierno.
  3. Mantenerse hidratado es fundamental para cuidar nuestra voz del frío. Así como el invierno reseca tu piel o tu pelo, lo mismo ocurre con las cuerdas vocales que deben forzarse un poco más para hablar o realizar cualquier actividad que las involucre. Al beber al menos 2 litros de agua al día las mantienes hidratadas y en buen estado.
  4. También es necesario disminuir el consumo de bebidas con cafeína, que en vez de hidratarnos generan el efecto contrario, resecando las cuerdas vocales. Sustitúyelos por zumos naturales, agua o infusiones sin teína. Si eres fumador modera también el consumo de tabaco, muy nocivo para tu voz en especial en invierno.
  5. Es importante no forzar la voz. No grites ni susurres, intenta hablar de forma natural sin tensar el cuello. Mantener una voz tensa puede hacer que perdamos la voz.
  6. Si por algún resfriado o alergia sufres de toses muy importante tomar la medicación pertinente, pues la tos continua puede secar tu garganta y afectar tu voz. El hábito de carraspear de forma constante es también nocivo para nuestras cuerdas vocales, por eso evítalo.
  7. Durante el invierno, el uso de las calefacciones hacen que el ambiente sea reseco, utiliza un humidificador en casa para que el ambiente sea más húmedo.
Si pierdes la voz con frecuencia consulta al logopeda, te enseñará a usarla mejor sin que te canses ni llegues a perderla.

Fuente: isep.clinic.
Autor: Carmen Pérez Araujo. 

jueves, 21 de mayo de 2015

CLAVES A TENER EN CUENTA CON PROBLEMAS DE LA VOZ.




¿PROBLEMAS DE VOZ? CONSEJOS BÁSICOS
Desde 1999 se conmemora el día mundial de la voz, este día tiene como fin informar y crear conciencia sobre los cuidados de la voz, no solo en cantantes, sino en todas las personas.
El objetivo es difundir la necesidad del cuidado de la voz, factor importante como medio de comunicación interpersonal, como instrumento de trabajo y como expresión.
La voz es un reflejo de nuestros sentimientos, expresamos todo lo que nos pasa a través de ella, y algunas veces tenemos tanta presión que nuestra voz no puede soportarla y se quiebra, apareciendo disfonías o afonías.
¿Cuáles son las causas de los problemas de la voz?
Las causas de los trastornos de la voz y varían, pueden ser factores individuales como gritar y elevar el volumen de la voz, estrés, fatiga física, mala técnica vocal, factores psicológicos… como por causas ambientales: cambios bruscos de temperatura, mala climatización, alcohol y tabaco, alergias, resfriados, trabajo continuado con la voz, etc.

¿Cuáles son los síntomas?
Los síntomas más comunes son irritación, dolor y picor de garganta, disfonía o ronquera, afonía o pérdida total de la voz, fatiga o cansancio vocal.
Si se realiza un diagnostico precoz y adecuado, la mayoría de los problemas de la voz pueden tratarse con éxito.
¿Quiénes son más propensos a padecer problemas de la voz?
1 de cada 3 personas utiliza la voz como herramienta de trabajo por lo que son ellos son los más propensos a padecer este tipo de trastornos debido a que pueden realizar un sobre esfuerzo vocal continuado. Los que encabezan la lista son los profesores, continuando por los monitores, teleoperadores, cantantes, actores, comerciales, locutores, etc.
Pero, con la llegada del frío, todos estamos más expuestos a sufrir algún problema de la voz  y cuando se tiene la voz quebrada, y forzarla es un trabajo exhaustivo.
¿Cómo puedo cuidar mi voz?
Aquí les daré 15 consejos para cuidar la voz
  • Procura no gritar, chillar o hablar por encima del ruido ambiente y de forma prolongada
  • Bebe MUCHA agua, una buena hidrataciones incide directamente en la salud vocal.
  • No fumes, evita el humo; el cigarrillo deshidrata las cuerdas provocando diferentes afecciones.
  • Bosteza, estira los músculos de la laringe y la relaja.
  • No carraspear; afecta la mucosa de las cuerdas vocales, en su lugar toma agua.
  • Evita comidas picantes; la acidez gástrica suele ascender por el esófago hasta las cuerdas vocales y afectar la mucosa.
  • Por cada taza de café que tomes, toma 2 de agua.
  • El estrés genera tensiones que afectan la respiración y la voz
  • Practica estiramientos y automasajes.
  • Procura siempre estar en una posición corporal saludable.
  • Habla lento; al hablar rápido interfiere la coordinación fonorespiratoria y empeora la comunicación
  • No abuses de tu voz; esto aumenta la rigidez laríngea.
  • Si una disfonía, dolor al tragar o molestia al respirar persiste más de 15 días es recomendable acudir a otorrino.
  • Calienta la voz si vas a utilizarla excesivamente.
  • Respira por la nariz;  recordando que una adecuada respiración nos ayuda a estar más relajados, sin tensiones, por ende tendremos una buena voz.
Fuente: Isep Clinic Alicante.

viernes, 14 de noviembre de 2014

DIFERENCIAS ENTRE DISFONÍAS Y AFONÍAS.



Trastornos de la voz, ¿cómo se producen las afonías y disfonías? ¿Cómo tratarlas?
Gritar más de la cuenta, hablar deprisa, no respirar correctamente o acumular demasiada tensión muscular a causa del estrés, son algunas de las causas que provocan que las cuerdas vocales sufran y que se produzca un deterioro de la voz que, incluso, puede llegar a desembocar en una pérdida total de la misma.
Al final se detallan algunos remedios caseros contra la afonía y disfonía.
Cuando hablamos, no siempre utilizamos la voz de forma adecuada, lo que puede llegar a provocar pasajeros, o más problemáticos, trastornos. Así, si bien la mayoría de las personas padecen el algún momento de su vida algún problema vocal que se soluciona en poco tiempo, también existe un porcentaje que sufre algún trastorno de este tipo que requiere la intervención de un especialista, según han destacado desde la Federación Internacional de Sociedades de Otorrinolaringología.

La franja de edad en la que son más frecuentes los trastornos de la voz se sitúa entre los 25 y 45 años y son ligeramente superiores en las mujeres respecto a los hombres. Asimismo, los profesores de colegio son los profesionales más afectados por las disfonías, con una prevalencia en este colectivo de aproximadamente un 22,5%, siendo ésta la causa más frecuente de baja laboral.

Pero éste no es el único colectivo de profesionales afectado, hay otros que también sufren este tipo de trastornos como abogados, locutores, funcionarios de atención al público y, en definitiva, todos los que usen la palabra como medio de trabajo. En estos casos, el profesional lo que necesita, no es tener una voz bella, sino resistente al uso diario y continuado y, generalmente, en condiciones medioambientales adversas.

Pero éste no es sólo un problema de adultos, ya que los expertos señalan que entre el 40 y el 60 por ciento de los niños también padecen trastornos de la voz, preferentemente entre los 6 y 8 años y en la época de la pubertad y más en niños que en niñas. En el niño, como en adulto, puede ser ocasionado por una alteración anatómica de la laringe o por una disfunción entre los diferentes órganos fonatorios. Así, en los más pequeños la patología más frecuente son los nódulos.

Disfonía y afonía: diferencias
El término disfonía es el utilizado de forma genérica para definir un trastorno de la voz, sin embargo, hay que saber distinguir entre afonía y disfonía. La primera se da cuando una persona se queda totalmente sin voz y la disfonía o ronquera, cuando la voz pierde calidad acústica, esto es, cambia de tono y se hace más sucia.

La afonía puede ser el estadio final de una disfonía que no ha sido bien tratada o que no se ha diagnosticado a tiempo. No es un problema muy frecuente, al contrario que la ronquera, que sí es bastante habitual. Las personas que padecen una disfonía crónica pueden acabar presentando una afonía en momentos puntuales, como consecuencia de un grito, un catarro o de cansancio excesivo. Estos abusos circunstanciales de la voz dan lugar a que una ronquera más o menos leve evolucione a una afonía, que aunque sea transitoria, supone la pérdida total de la voz.

En cuanto al origen de estos trastornos, cabe destacar que en el caso de cantantes y actores, que educan la voz durante su formación para afrontar el esfuerzo de voz que les exige su profesión, para ellos la capacidad de resistencia al habla la sitúan los expertos en un término medio de dos horas diarias. El resto de la población el margen se amplía hasta las cuatro horas. Por encima de ese tiempo hace falta tener una técnica depurada para no lesionar la voz.

Y es que la voz tiene unas posibilidades limitadas de uso que dependen de cómo se sepa utilizar y de la capacidad de cada persona para el habla, por lo que en la mayoría de los casos la causa de la disfonía es el mal uso y abuso vocal, es decir, el esfuerzo vocal.

Entonces, ¿cuándo se utiliza mal la voz? Sobre todo al gritar o al hablar fuerte de forma prolongada, puesto que se ejerce una excesiva tensión muscular sobre la laringe, la región de cuello y los hombros. Esto contribuye a que las cuerdas vocales se congestionen e inflamen, lo que les dificulta su normal vibración y hace que produzca un sonido sucio, alterado, que es lo que comúnmente se denomina “voz ronca”.

Si se trata de un episodio puntual (hablar fuerte por estar en una discoteca, en un concierto…) y después de ello no se vuelve a forzar la voz durante unas ocho o diez horas, la disfonía puede desaparecer sin más. Pero si ese periodo de recuperación no se cumple y se vuelve a abusar, la inflamación se podría convertir en permanente.

Tipos de disfonía

Las disfonías más frecuentes son las de tipo funcional. En estos casos no se identifica ninguna lesión anatómica en los órganos fonatorios, sino que se deben al abuso y mal uso vocal: hablar excesivamente y con una intensidad o tono superior al normal, gritar, carraspear y toser frecuentemente, cantar con una técnica inadecuada o inhalar polvo, humo de tabaco y gases irritantes, además de beber alcohol.

Por el contrario, las disfonías orgánicas conllevan la existencia de una lesión en los órganos fonatorios, siendo las más frecuentes los nódulos y los pólipos. "De hecho  , la patología benigna más diagnosticada en relación a las cuerdas vocales es la presencia de nódulos (17-24% de los casos), que se producen de forma habitual entre la segunda y quinta décadas de la vida y de forma predominante en las mujeres”.

“En el caso de los varones, sin embargo, es más frecuente la existencia de pólipos, en una proporción de cuatro a uno con respecto a las mujeres y se producen generalmente entre los treinta y los sesenta años",
Pero además, las disfonías también pueden ser de origen traumático (provocadas por un accidente de tráfico, golpe con objeto punzante, tubos nasogástricos permanentes, intubación endotraqueal, etc), audiógeno (ocasionadas por un déficit auditivo) e incluso psicógenas (producidas por trastornos psicológicos, tales como neurosis, respuesta inadecuada al miedo, comportamientos hipocondríacos, etc).
Tratamientos eficaces


Según los expertos de la Federación Internacional de Sociedades de Otorrinolaringología, cualquier persona con trastornos de la voz debe acudir al otorrinolaringólogo cuando la alteración se prolongue durante más de 15 días o cuando se repita con frecuencia.

El otorrinolaringólogo es el especialista capacitado para establecer el diagnóstico y tratamiento adecuados. Además, aquellas personas paras las que la voz es una herramienta básica de trabajo, como es el caso de cantantes, actores o locutores, deben realizar una revisión al menos una vez al año.

El tratamiento de las disfonías se asienta sobre tres pilares fundamentales: la medicación, la rehabilitación y la cirugía. También se deben considerar las medidas preventivas. "El orden en que se tienen que establecer ha de determinarlo el otorrinolaringólogo. No obstante, conviene señalar la importancia que tiene el trabajar en equipos multidisciplinares en los que el especialista coordina el tratamiento con logopedas, profesores de canto y dicción, e incluso psicólogos", señala el doctor Fernández.

En muchas ocasiones basta con la rehabilitación para resolver una disfonía, corrigiendo los malos hábitos de emisión vocal mediante técnicas de relajación laríngea, de coordinación fonorrespiratoria y de emisión de voz utilizando todos los recursos fonatorios de los pacientes, en especial el aire de los pulmones, que es la base energética para la emisión de voz.

"Este es el caso de los nódulos de formación reciente no así de los que se han formado antiguamente, que requieren microcirugía laríngea antes de iniciar la rehabilitación para evitar que reaparezcan. Esta cirugía, aplicada tanto a nódulos como pólipos y edemas apenas ocasiona complicaciones y tiene unas expectativas de éxito cercanas al 98%. También es muy eficaz la cirugía en lesiones del espesor de las cuerdas vocales y las malformaciones congénitas", añade este experto.

Sin embargo, la cirugía laríngea muy pocas veces es necesaria en población infantil. En general, los niños que presentan disfonías es porque hablan muy alto. Tratan de imponerse a los demás aumentando el volumen de voz. No obstante, estos problemas suelen desaparecer cuando en la pubertad hacen la muda vocal y la laringe crece. Aun así, se les puede ayudar mediante normas de higiene vocal.


Fuente: 
portalnet.cl

TRASTORNOS DE LA VOZ EN LOS PROFESORES.




Uno de cada cuatro profesores sufre trastornos de voz

Un tercio de los docentes sufre alteraciones de la voz al menos una vez durante el curso académico, lo que ocasiona una gran parte de las bajas laborales

Uno de cada cuatro profesores sufre trastornos de voz, según ha concluido la ponencia Patología de la Voz, editada por la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Patología Cérvico-Facial (SEORL- PCF), que se ha presentado en Madrid. 65 especialistas españoles, europeos y americanos han participado en esta obra, que actualiza la situación de los trastornos de la voz en España y su tratamiento.

“Los profesores son el colectivo que, con diferencia, más patologías de la voz sufre”, explica el profesor Ignacio Cobeta, jefe del Servicio de otorrinolaringología del Hospital Ramón y Cajal, de Madrid. Y quienes más las padecen son quienes tratan con niños pequeños. Los trastornos de la voz aumentan a medida que disminuye la edad de los niños a los que enseñan. En una universidad, el aula suele tener un ruido ambiental de entre 35 y 40 decibelios (db), por lo que se requiere hablar entre 55 y 60 db. En cambio en una clase infantil el ruido alcanza los 60-65 y los profesores deben hacerse oír a 70-75 db.

Se calcula que un tercio de los docentes sufre alteraciones de la voz al menos una vez durante el curso académico, lo que ocasiona una gran parte de las bajas laborales, según datos de la SEORL. Los nódulos en las cuerdas vocales son más frecuentes en mujeres que en hombres, ya que la laringe femenina es más pequeña y las cuerdas deben vibrar el doble, advierte este especialista.

A pesar de ello, “la mayoría de docentes no busca ayuda y sólo recurre al tratamiento y no a la prevención”, subraya Cobeta. En este sentido, los otorrinos recomiendan no hablar en clase más de 4 horas al día, hidratarse, evitar el tabaco y el alcohol, hacer llamadas de atención no vocales (aplausos o pitidos), utilizar grabaciones y fomentar la participación en el aula, aprovechar los recreos para descansar la voz o valerse de micrófonos y altavoces. “Se puede recurrir a clases de logopedia para aprovechar mejor el potencial de la propia voz y no forzarla”, añade el especialista.

Cirugía de la voz

Asimismo, cabe destacar el avance que supone la cirugía ambulatoria de la voz en parálisis vocales, que sufren a menudo quienes fuerzan la voz y quienes se someten a intervenciones quirúrgicas relacionadas con el aparato fonador (como en tiroides), explica el doctor Faustino Núñez, del Servicio de otorrinolaringología del Hospital Central de Asturias. “Basta inyectar unas sustancias que ayuden a restaurar la vibración de las cuerdas vocales”, comenta.

Este tratamiento está siendo cada vez más utilizado en ancianos, apunta, “ya que con la edad se va perdiendo la calidad de la voz y gracias a la cirugía se consigue rejuvenecer y eso reduce el aislamiento social”. Este tipo de intervenciones también se están utilizando en transexuales.


Fuente: tuotromedico